lunes, 4 de septiembre de 2006

Ojitos Callados (primera parte)

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Ojitos Callados
I

Donde se esconda la ternura la alcanzaré,
aunque me pierda en profundos recovecos,
continuando mi obra de amaneceres cumplidos
y tardes y noches en contemplación fortuita,
con la cabeza en alto, una mueca reconocible,
tratando de agradar hasta el lejano horizonte,
penetrar el mar con mis oscuros vigilantes,
sin siquiera saber como continuar la farsa,
como tal payaso en el circo itinerante de a vida,
con el discurso gracioso que pueda ofrecer
al palco indiferente de aquel destino sufrido,
encantando a quienes aún no logro divisar,
allí en lo más alto y oscuro de este espectáculo.

Es entonces cuando me pregunto en mi soledad,
en mi total locura desbocada en mi cuarto,
desfalleciendo por saber si mi mensaje se entiende,
si esos ojitos callados solo actúan tal como los míos,
si esos ojitos callados comprenden de la emoción,
del chocar de mundos idílicos tras estas pupilas
y aquel réquiem sentido en honor a mi corazón,
de la razón enterrada bajo los pastos del averno,
hace bastantes lunas dormidas bajo las nubes,
bastantes soles coronando esperanzas del loco,
loco respeto exacerbado en total idiotez,
testarudez dado por profundo mensaje de muerte,
a mi entregado en mi total ceguez y dicha.

Son los días más afortunados frente a tú presencia,
el caminar firme por las vías de incontables líneas,
bajo esos árboles, los de los colores opacos y enormes,
en donde el tiempo detiene los segundos tormentosos
y los vientos se agitan vivamente en loas marinas;
bajo esa visión mi vida gira en ángulos contradictorios,
mi corazón se encuentra allí en estado de ebullición,
más, si esos ojitos dormidos se posan sobre los míos,
los cuales están allí ardiendo de felicidad contenida,
salpicando chispas de pasión por doquier alrededor,
consumiendo del alimento que deje en sinrazón,
en utopías de sentimientos que no logran ser real,
papeles llenos de tinta, ensangrentadas por lágrimas.
..
...
Sus sueños se presentan desconocidos e inalcazables para cualquiera que la observe, aún conociendola un tanto más... sus "ojitos callados", más que perdidos hacia cualquier parte del universo, resultan enigmáticos y atractivos, al menos desde mi punto de vista...

4 comentarios:

Unknown dijo...

Como siempre felicito vuestra obra, ojala pronto nos deleite con más poesia vuestra.

Miguel Grammont dijo...

Me gusto en extremo vuestra obra. Es tan solo la incertidumbre, el caminar sobre un puente cayendo, dar pasos de ciego, saber que en esta vida nada sabemos.
¡Qué dominio tan inexpugnable es el alma humana!
No basta con tener una férrea voluntad, ni de poseer el ánimo de un guerrero, no es cosa de poder, ni de armas, tampoco de palabras y persuasión.
En realidad nada basta, no podemos intentar derretir fuego con el fuego, el acero sólo rebota otro tanto con un igual.
¡Ah férrea voluntad humana! La porfía de un ánimo enceguecido tratando de llamar a otro ánimo enceguecido.
Eso somos, ciegos tratando de guiar a otros ciegos, no sé que es más inútil, el torpe intento del bardo para llamar a la doncella o la boba ilusión de la doncella con príncipes envilecidos y guerreros corruptos.
¡Será mejor callar, una vez más mi pluma es más rápida que mi pensamiento!
Pues entonces, voto a la condición humana, utópica e ilusa, inocente y a la vez artera. ¡Bebed conmigo!
Embriaguemonos con nuestra dulce insensatez.
He allí mi lamento, tal vez también el vuestro. Pues esta noche la musa oscura domina, los cantos de alegría serán aclamados mañana. Mas no esta noche

El pajariyus dijo...

Me parece q vale la pena hacer todo lo q sea necesario por estar frente a tales "ojos callados" quizas esa es la idea de estar aka..

felicitaciones muy wenoo

Unknown dijo...

¿Cuándo veremos la segunda parte de este escrito?
Tal cómo dijo el Caballero del viento, para eso estamos acá para que lo que Hamlet llama ojos callados puedan ver lo que creamos.
Y cómo hemos visto estos ojos no son tan silenciosos, poco a poco se suman nuevos miembros a EDS que buscan plasmar sus ideas y sentimientos en estas hojas virtuales.