jueves, 15 de marzo de 2007

La esperanza y amor en tu sendero


Voy siguiendo el camino de mis sentimientos, podría decir que te extraño mucho, y es un posible motivo, o tal vez esta dulce vida que emana de tu piel y que a lo lejos reconozco esa hermosa sensación, otra muy posible alternativa, pero si voy por este sendero es para perderme en él, para que me desordene un poco, para saber que no hay motivos para realizar cada paso, que a pesar del orden social podemos crear un caos que no dañe a nadie, poder mirar al lado y poder sonreírle a nuestro semejante, dejar abiertas las puertas del corazón y como viento dejar entrar la alegría de cada día y echar para siempre las penas que nos agobian y no nos dejan levantar la mirada hacia el cielo de nuestros deseos.

Por eso hoy me siento a la sombra del árbol de mi alma, no tengo prisa para levantarme, ni aunque estuviera seco, ni con una tormenta ni con deberes que debo hacer, pues tengo mucho por lo que sonreír, pues así como los frutos de las ramas quiero que broten los frutos de la esperanza en mi corazón, que se expandan por todo mi ser, que caigan y sean recogidos por quienes lo necesiten, pues no quiero que se pudran egoístamente en mi ser o que su surgimiento haya sido en vano, no, mas bien quiero que puedan dar un poco de luz a quien lo necesite, paz a quien la busca hace mucho y esperanzas a todos los que la deseen.

Y al hacer esto veo que todo es mucho mas tranquilo, que todo, con fe y coraje, se puede lograr, que los imposibles se pueden romper con un tierno abrazo hacia el otro, tomar firme la mano de nuestro hermano, bendecir al que maldice nuestros deseos, luchar por un mañana mejor para la gente que amamos, invertir en sentimientos hoy y ganar en cariño eterno en el cercano mañana, pues en todos estos actos veo el amor en su mas pura expresión, no hay soledad en el camino de quien toma su espada combate para romper sus limitaciones, pues, sea lo que sea que los motive a todos siempre debemos luchar por el bien, ser feliz y darle la mano al enemigo tanto nos gane o seamos nosotros los victoriosos, pues del dolor y la alegría siempre aprenderemos, pues a pesar de nuestras debilidades, muchas virtudes y fortalezas arman y protegen nuestras vidas, pero la fuerza de voluntad no basta, pues no estamos solos, y solo nada en el mundo crece, vive y se mantiene, en este caos hermoso llamado vida muchos se encuentran haciendo un tonto orden, creyendo que en solitario pueden ser felices, dependiendo de lo material, pensando ganar respeto con la arrogancia, pero ni en la soledad, lo material ni en la arrogancia esta nuestro corazón y nuestra felicidad, solo su absurdo deseo de creerse superiores y poniendo máscaras para la gente que los ama, pues es aquí justamente que no nos perdemos en el camino sino que seguimos el canto de sirenas del odio y el llanto, y si no nos amarramos como Odiseo al mástil de nuestro amor nos será difícil salir de allí, profunda es la oscuridad y el silencio ahoga la ultima sonrisa de nuestro corazón…

Por eso prefiero que mi camino se extravíe, se va hacia donde muchas veces me dijeron que no fuera o que era imposible llegar, pero a pesar de esas advertencias es hacia allá mismo donde mi alma se dirige, pues aunque haya recibido burlas, abandono y en soledad haya recorrido el camino, veo que mi sendero va directo a la luz, con esperanza de que todo el camino, la lucha, la alegría y el amor fue gracias a ti, que nada de esto podría haber sido posible sin tener en mi pupila tu bella mirada y en mis labios los besos de miel que tu me entregarías, pues si logre todo esto fue y será por y para usted, este sendero de locura y amor es por todo lo que en días su alma me ha entregado y que para la mía han sido años de alegría y paz para olvidar lo malo y abrazarme a usted y cerca de su corazón continuar este bello camino que hará en mi vida hacer realidad mis sentimientos en su honor: el ser juntos felices por siempre mi amor.


En honor a tus dulces días que tu señor a vuestro lado a podido tocar de tu mano el cielo.


Aragorn Corazón de León

2 comentarios:

Sant Bufó dijo...

Tocar el cielo..

Miguel Grammont dijo...

"El manual del combatiente"
(dónde está inserto El fin de la Batalla)

Me recuerda a un joven que conocí en el pasado. Un joven que si su mejilla era abofeteada, él ofrecía la otra...

...y en más de una ocasión lo hizo.

Sin embargo hoy es orgulloso e ondómito, aunque no lo aparente, su fuego está en el punto máximo hirviendo dentro de su alma. Pero aún así no abandona el buen camino, a pesar de los desvíos que ha sufrido.

Buen escrito Aragorn, caballero espectral