Me sumo a la santa locura de tus labios, me voy enredando para siempre en el dulce delirio de saberme vivo en tus manos, de ocultarme en tus brazos y elevarme como sueño de niño al cielo de nuestro amor.
Agrégame en el hermoso tour de tu piel y no me dejes bajar de este recorrido que me conduce a vuestros sentidos de tu corazón, de enjaularme en tus tierras y adictivamente hacer este camino una y mil veces y con la mayor certeza de que jamás me cansare de ir y venir por tus dominios y conquistarlos lentamente con mi amor.
Pues no me detendré jamás ante tu mirada, cabalgo con decisión hacia la luz que de tu alma se eleva por el firmamento como si fuera una nueva constelación en las noches en que el mundo y el tiempo se detienen en ante nuestra presencia y se vuelven el acorde, letra y canción de nuestra melodía que ya no es un dúo sino una armonía propia de nuestros corazones.
Si intentara detenerme, me estrellaría irremediablemente con mis sentimientos y atacado por la soledad que ya abandoné vería mi alma en serio peligro, la angustia destruiría mis emociones y percibiría como se seca la sonrisa que refleja vuestra alegría de infinitos.
Por eso aquí me tienes, hincando mis rodillas a vuestra voluntad, siervo de tu amor, un montaraz que sólo espera tus órdenes y combatir eternamente por usted, no descansar hasta que cada día vuelva a ver su sonrisa y el dulce canto de su risa, y volver a comenzar en este bello ciclo que en tus labios mi alma desea por siempre realizar.
Agrégame en el hermoso tour de tu piel y no me dejes bajar de este recorrido que me conduce a vuestros sentidos de tu corazón, de enjaularme en tus tierras y adictivamente hacer este camino una y mil veces y con la mayor certeza de que jamás me cansare de ir y venir por tus dominios y conquistarlos lentamente con mi amor.
Pues no me detendré jamás ante tu mirada, cabalgo con decisión hacia la luz que de tu alma se eleva por el firmamento como si fuera una nueva constelación en las noches en que el mundo y el tiempo se detienen en ante nuestra presencia y se vuelven el acorde, letra y canción de nuestra melodía que ya no es un dúo sino una armonía propia de nuestros corazones.
Si intentara detenerme, me estrellaría irremediablemente con mis sentimientos y atacado por la soledad que ya abandoné vería mi alma en serio peligro, la angustia destruiría mis emociones y percibiría como se seca la sonrisa que refleja vuestra alegría de infinitos.
Por eso aquí me tienes, hincando mis rodillas a vuestra voluntad, siervo de tu amor, un montaraz que sólo espera tus órdenes y combatir eternamente por usted, no descansar hasta que cada día vuelva a ver su sonrisa y el dulce canto de su risa, y volver a comenzar en este bello ciclo que en tus labios mi alma desea por siempre realizar.
Feliz día del duende falso hermosa bufón, Te amo y disculpa mi tonta idiotez, gracias por tu hermosa petición que en dos meses hace realidad mi camino hacia ti.
Aragorn Corazón de León
3 comentarios:
Cuan parecido somos compañero de letras , hace tiempo que no me sentia identificado por algun escrito, tiempo demaciado largo para mi.
y permitidme tomar algunas palabras
para mi dama
"Por eso aquí me tienes, hincando mis rodillas a vuestra voluntad, siervo de tu amor"...
Que lindo y bello es el amor. El amor en general, el de las santas cociencias hacia el fin maxime: el puro.
De tratados se ha escrito mucho sobre este sentimiento, pero cada cual lo expresa a su manera, cada uno lo siente como si nadie más sirviese para expresarlo...
Hoy, el Señor Corazón de León, nos da una lección más de como se puede expresar El Sentimiento. Propio, natural y magnánimo... a eso, lo que escribe Don Aragorn, creo que nadie puede agregar o quitar nada.
Yo creo que si se le pueden quitar algunas cosas ¬¬
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